lunes, 31 de marzo de 2008

Una ley de país para una educación del siglo XXI - Jaume Graells



Para empezar, debo decir que me parece descabellada la idea de pensar que la escuela Pública, va a convertirse en Privada. Los vienes públicos deben seguir existiendo y ofreciendo sus servicios a los ciudadanos. De igual modo, opino que el término "privatizar" se está sacando un poco de contexto. Cuando está la iniciativa de implantar una nueva ley, en teoria, es para mejorar, aunque a veces no se consiga, pero ha sido tanto el "ruido" que han hecho los profesores de ésta, que todo el mundo, aún aquél que ni tan solo se haya leido las bases (y digo las bases, no los puntos que marcaban los trípticos y dípticos anunciando la vaga del 14-F), opinan que esta ley aporta nada más connotaciones negativas. Sí es cierto, que la medida de que el director sea quien decida que perfil de profesorado desea tener o no en su centro, no es, para mi punto de vista, la más adecuada, ya que para eso, hasta el dia de hoy, han existido unas oposiciones, con el fin de garantizarte una plaza fija, por méritos propios.

"Resulta inacceptable un sistema que prima el mínim esforç i la no-assumpció de responsabilitats."

Estoy totalmente de acuerdo, con esta cita del autor. No puede ser que el profesor tenga la percepción, de que su labor profesional, sea ir al aula, enseñar el temario, y marchar a casa. No. La tarea docente tiene una implicación, fuera y dentro de la escuela. No sólo hablamos del aprendizaje del alumno, sino que deberiamos estar hablando, también, de la del docente; de una formación permanente, con el fin de renovar sus conocimientos y adaptarlos al medio y contexto existente.

Lo que realmente se debería hacer, en lugar de tapar agujeros, es implantar una ley que realmente merezca la pena, cambiando el sistema educativo, si es preciso, que tantas dudas está suscitando, y empezar, en primer lugar, porque los políticos se conciencien que de este modo, no llegaremos a ningun lado, y los problemas ya van dejandose ver, cada vez, con más ímpetu.

1 comentario:

Inés Lendínez dijo...

Felicidades por tu comentario!

Enserio me ha gustado mucho lo que has escrito y ya no el contenido, sino la forma en el que lo has hecho, como tiene que ser dejando las cosas claras y sin medias tintas.

Creo que como tu bien dices es verdad que existen aspectos positivos de esta ley sobre todo el de la frase que has citado donde el docente no puede coger realizar sus clases y marcharse pero de todos modos no veo que exista ninguna cohesión entre la privatización y la apuesta por la escuela inclusiva y plural y por la integración del colectivo inmigrante, veo que es una nueva forma de engañar a todos aquellos que no saben de que va el tema simplemente para hacer campaña de esta ley, en la que como puede notarse estoy en total desacuerdo. En todo caso, lo que debería hacerse es al revés desprivatizar todas las escuelas e invertir mucho más en las públicas, otro gallo cantaría..